Por falta de espacio, los vendedores han tomado calles, aceras y áreas
verdes, provocando inconvenientes a comerciantes y residentes en el
lugar
22 años de construcción
22 años de construcción
Villa Consuelo.- Entre reinicios, paralizaciones y promesas, cientos de comerciantes y buhoneros del mercado de Villa Consuelo llevan 22 años esperando la conclusión de los trabajos de construcción de esa obra de vital importancia para la vida económica y social para los habitantes de esa empobrecida barriada del centro de la capital.
Los trabajos fueron iniciados en el 1990, durante la sindicatura de Rafael Suberví Bonilla y, desde entonces, han sido paralizados y reiniciados en varios gobiernos y sindicaturas, por alegada falta de fondos.
Mientras tanto, vendedores y compradores se desenvuelven en medio de la más peligrosa insalubridad.
Allí desempeñan sus actividades entre escombros, basura, aguas negras y ratas, que contaminan los comestibles que comercializan y ponen en riesgo la salud de los clientes.
Los trabajos de reconstrucción, ampliación y modernización del mercado se iniciaron con una inversión inicial de RD$17 Millones.
Se desconoce el costo actual de la edificación, a cargo de la Oficina Supervisora de Obras del Estado.
Se trata de una estructura metálica de dos niveles, ubicada entre las calles Manuela Diez, Bartolomé Colón, Juan Evangelista y Arzobispo Valera.
El proyecto contempla la construcción de cuatro cuartos fríos, un área de almacén, un espacio de montacargas, una cisterna con capacidad superior a 140 mil galones y la instalación de planta propia de eléctrica propia.
En el primer nivel se venderán los víveres, las carnes y las frutas. En el segundo, las obras de artesanías, las bisuterías y sería instalada una cafetería.
La lentitud con que marchan los trabajos preocupa al presidente de la Asociación de Comerciantes del mercado de Villa Consuelo, David Ramos.
“La fecha de terminación de los trabajos es incierta. No sabemos cuándo terminarán”, precisó.
El comerciante está preocupado, además, por el silencio del Ayuntamiento del Distrito Nacional en torno a la reubicación de los miembros de esa entidad.
“Después de entregarle al ADN un listado de los comerciantes de este mercado, hacíamos reuniones periódicas con los representantes de esa institución, pero desde noviembre no tenemos ningún tipo de informaciones sobre nuestra situación en el mercado”, afirmó Ramos.
La incertidumbre se apoderó de los vendedores que temen que las modernos locales sean repartidos entre los “compañeros” del partido de gobierno y que los vendedores q ue llevan décadas en el lugar se queden fuera de las instalaciones del mercado.
“Yo tengo mi local y nadie me ha llamado para reubicarle , para asignarme uno de los locales nuevos”, asegura Rafael Villanueva, quien lleva 40 años vendiendo en ese establecimiento.
Agregó que “aunque tengo mi local y mi título, nadie me ha dado seguridad de que reubicarán.
Informaciones extraoficiales indican que la edificación tendrá unas 100 góndolas, pero los vendedores superan con creces esa cifra.
Sin embargo, David Ramos insiste en que debe reanudarse la comunicación entre los comerciantes y las autoridades del ADN para definir la entrega de los espacios sin discriminación ni injusticias.
UN APUNTE
Invadida
En 1998, las instalaciones del mercado de Villa Consuelo fueron invadidas por 26 familias damnificadas del huracán Georges que habitaron por largo tiempo en elugar en condiciones infrahumanas. Dejaron el lugar luego de un acuerdo con Jhonny Ventura, el alcalde de entonces.
Los trabajos fueron iniciados en el 1990, durante la sindicatura de Rafael Suberví Bonilla y, desde entonces, han sido paralizados y reiniciados en varios gobiernos y sindicaturas, por alegada falta de fondos.
Mientras tanto, vendedores y compradores se desenvuelven en medio de la más peligrosa insalubridad.
La incertidumbre se apoderó de los vendedores del Mercado de Villa Consuelo debido al silencio que mantiene el Ayuntamiento del Distrito Nacional sobre su reubicación en las remodeladas instalaciones.
Allí desempeñan sus actividades entre escombros, basura, aguas negras y ratas, que contaminan los comestibles que comercializan y ponen en riesgo la salud de los clientes.
Los trabajos de reconstrucción, ampliación y modernización del mercado se iniciaron con una inversión inicial de RD$17 Millones.
Se desconoce el costo actual de la edificación, a cargo de la Oficina Supervisora de Obras del Estado.
Se trata de una estructura metálica de dos niveles, ubicada entre las calles Manuela Diez, Bartolomé Colón, Juan Evangelista y Arzobispo Valera.
El proyecto contempla la construcción de cuatro cuartos fríos, un área de almacén, un espacio de montacargas, una cisterna con capacidad superior a 140 mil galones y la instalación de planta propia de eléctrica propia.
En el primer nivel se venderán los víveres, las carnes y las frutas. En el segundo, las obras de artesanías, las bisuterías y sería instalada una cafetería.
La lentitud con que marchan los trabajos preocupa al presidente de la Asociación de Comerciantes del mercado de Villa Consuelo, David Ramos.
“La fecha de terminación de los trabajos es incierta. No sabemos cuándo terminarán”, precisó.
El comerciante está preocupado, además, por el silencio del Ayuntamiento del Distrito Nacional en torno a la reubicación de los miembros de esa entidad.
“Después de entregarle al ADN un listado de los comerciantes de este mercado, hacíamos reuniones periódicas con los representantes de esa institución, pero desde noviembre no tenemos ningún tipo de informaciones sobre nuestra situación en el mercado”, afirmó Ramos.
La incertidumbre se apoderó de los vendedores que temen que las modernos locales sean repartidos entre los “compañeros” del partido de gobierno y que los vendedores q ue llevan décadas en el lugar se queden fuera de las instalaciones del mercado.
“Yo tengo mi local y nadie me ha llamado para reubicarle , para asignarme uno de los locales nuevos”, asegura Rafael Villanueva, quien lleva 40 años vendiendo en ese establecimiento.
Agregó que “aunque tengo mi local y mi título, nadie me ha dado seguridad de que reubicarán.
Informaciones extraoficiales indican que la edificación tendrá unas 100 góndolas, pero los vendedores superan con creces esa cifra.
Sin embargo, David Ramos insiste en que debe reanudarse la comunicación entre los comerciantes y las autoridades del ADN para definir la entrega de los espacios sin discriminación ni injusticias.
UN APUNTE
Invadida
En 1998, las instalaciones del mercado de Villa Consuelo fueron invadidas por 26 familias damnificadas del huracán Georges que habitaron por largo tiempo en elugar en condiciones infrahumanas. Dejaron el lugar luego de un acuerdo con Jhonny Ventura, el alcalde de entonces.
Escrito por: PILAR MORENO (pilarmoreno26@hotmail.com)
Fuente: ElNacional.com.do
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