Hoy se conmemora el Día Mundial de la Hemofilia, una enfermedad genética recesiva que impide la buena coagulación de la sangre.
MUNDO.- Desde 1989, cada 17 de abril se celebra el Día Mundial de la Hemofilia, enfermedad que afecta a una de cada mil personas en el planeta.
La hemofilia es un trastorno hemorrágico en el cual la sangre tarda más de lo esperado en coagular; la carencia de factores de coagulación define el tipo y gravedad del padecimiento.
La celebración de este día tiene el objetivo de concienciar sobre la realidad de esta enfermedad de origen genético, que quienes la padecen tienen que ser tratados de por vida.
Las personas que nacen con hemofilia carecen de un factor de coagulación o lo tienen en baja cantidad.
Los dos tipos principales de hemofilia son A y B. En la hemofilia A, el factor VIII (8) de coagulación está ausente o en concentración baja. Cerca de 9 de cada 10 personas que sufren hemofilia tienen el tipo A; en la hemofilia B, el factor IX (9) de coagulación está ausente o en concentración baja. Se presenta en 1 de cada 25 mil varones nacidos.
La Organización Mundial de la Salud estima que en el mundo existen 400 mil hombres con hemofilia, y el promedio de hemorragias que llegan a tener es de hasta 30 al año.
La elección de la fecha del 17 de abril como Día Mundial de la Hemofilia se produjo en 1989 y responde al nacimiento de Frank Schnabel, fundador de la Federación Mundial de Hemofilia.