Nuestros hijos empiezan a “cucutear” entre nuestros álbumes de fotos viejas y se encuentran con alguna foto en la cual corríamos con una pata de gallina en la mano.
¡Cuéntame mami! ¡Qué navidades más divertidas!
Los recuerdos se agolpan y volvemos a corren para escapar de la guerra de garbanzos que explotábamos los primos y que hacían de la noche buena extremadamente divertida y excitante.
Que decir de la sensación de bajar las estrellas con las patas de gallina en el patio totalmente a oscuras. Cuantas formas llegamos a construir con el movimiento de nuestras manos.
La ansiedad de los últimos minutos del año, en que nos preparábamos para llenar el cielo de humo y color con los fuegos artificiales. No quedaba ni un solo rincón del cielo sin conquistar.
¡Waoooo, qué maravillosos recuerdos de infancia!
Sin embargo, esta es solo la cara hermosa de la moneda. A pesar, que muchos de nosotros guardamos solo bellos recuerdos de aquellas Navidades, otros, llevan dentro un sabor amargo.
No hablamos solo de los niños, muchos adultos también fueron víctimas de los fuegos artificiales. Las clínicas y hospitales recibían una gran cantidad de heridos. Incluso muchas personas quedaron marcadas de por vida, gracias a las quemaduras y las mutilaciones.
Las campañas de concientización llegaban a los canales de televisión e incluso recordamos que se nos mostraran crudas imágenes de personas que fueron víctimas de la pirotecnia. Y es que, este es un arte que solo debe ser utilizado por profesionales. Lamentablemente, lo aprendimos con la experiencia.
Es por ello, que en nuestro país se prohibió el uso y la comercialización de la pirotecnia por personas y empresas no autorizadas, según la la Ley 340-09 sobre el Control y Regulación de productos pirotécnicos.
Es bueno recordarlo cada año, para no dejarnos envolver de la excitación y la imprudencia, tratando de conseguir fuegos artificiales, de manera ilegal y mucho menos exponer a nuestros pequeños y jóvenes ¡Es importante, crearles conciencia y presentarles las consecuencias que puede traer el uso de ellos!
Permitamos que se llene nuestro cielo de color y alegría por los expertos. Llevar este y cada año los mejores recuerdos de la Navidad.