01 agosto 2013

Comerciantes de Villa Consuelo los chinos "Ya no son solo los pica pollos"

Puntos de vista
No son cuentos chinos, vale
NELSON MARTE

Fritz Cineas se pone serio y dice que no es cuestión de huevitos o plastiquitos, sino de que nos sentemos a abordar los asuntos de fondo de la agenda dominico-haitiana, los “económicos y migratorios”, subraya, y tiene toda la razón del mundo Su Excelencia el embajador. En Villa Consuelo los intereses criollos encienden otra alerta roja.

La Asociación de Comerciantes denuncia que unos chinos les están arrebatando un activo comercio que mueve cada día millones de pesos, y miles de gourdes, dólares y hasta euros en que se transan negocios.

El viejo mercado capitalino, que de niños nos traía desde callejones, patios, solares y talleres a venderle por unos centavos pedazos de aluminio, calamina, plomo, hierros, cobre y todo tipo de metales, en lo que eran los inicios del “mercado chatarra”, un poco transparente mercado de exportación hacia China.

Villa Consuelo, enclave de acopio y venta de viandas, lencería, bisutería, artesanía, maderas, todo tipo de artículos usados, yerbas, ramos y raíces milagrosas en un sinfín de dolencias incluyendo el mal de amor, y santería piadosa para conectar con Lo Alto.

Villa Consuelo, que en demostración de creativa diversificación vende también mucho del whisky que se bebe y de los más finos perfumes que irradian exóticas fragancias por todo el país, es una de las últimas plazas de interés para la recia competencia comercial china.

Tanta belleza y lucro en Villa Consuelo no podían ser ajenos a la agresiva expansión mundial de los chinos, y de su recia ofensiva comercial. Mientras nos embullábamos con las exquisiteces de la China Town de Pochy Ng, a los barrios del Distrito, de la provincia Santo Domingo y otras ciudades grandes llegó de Oriente una competencia que arrasó con muchas de las fondas y comedores criollos.

(El negocito de quien tenga las uñas más largas y hermosas también vino de China, pero esa es otra cosa, pues aquí no se conocía la tecnología y en materia de salones de belleza a las nuestras hay que sacarle lo suyo aparte, sea aquí, en Nueva York, Europa o Puerto Príncipe).

Como no conformándose con apropiarse de buena parte del mercado de los comedores y fondas, barridos por los pica pollos chinos, ahora atacan el comercio de Villa Consuelo, Villa María, Villa Francisca y zonas aledañas, mientras se informa por otro lado que la empresa Shenzhen Zhongjin Nonfemet Company Limited, del Estado chino, habría pasado a ser propietaria mayoritaria de concesiones para explotar oro, plata y níquel en nuestras montañas.

La fuerte competencia de los de Oriente, y el orgullo nacionalista rayando en la pedantería con que se manejan los haitianos, no son cuentos chinos, vale.

Y deberían llevar a preguntarnos, aún sea volviendo a llover sobre mojado: ¿hasta cuándo nuestra clase dirigente, en especial políticos y empresarios, van a permitir que en materia de intereses económicos estratégicos, como en tantas otras áreas vitales, sigamos navegando como barco sin rumbo? 


Fuente: Listin Diario