En el interior de Villa Consuelo, la situación rebosa la copa
Cada vez los ciudadanos son empujados de sus espacios mientras crece la inseguridad
Cada vez los ciudadanos son empujados de sus espacios mientras crece la inseguridad
La ocupación de los espacios públicos continúa en crecimiento en el Distrito Nacional y cada vez más negocios y vehículos se instalan sobre las aceras y las calles, sin que las autoridades responsables tomen medidas para impedir esta violación.
El fenómeno crece no solamente en la Duarte con París, José Martí y áreas vecinas, sino que se extiende y hoy en barrios como Villa Consuelo, calles del sector Don Bosco, Leopoldo Navarro, Pedro Livio Cedeño y otras vías, el peatón cuenta con muy poco espacio para caminar.
En Villa Consuelo, los espacios públicos no alcanzan para instalar negocios de todo tipo.
En la propia avenida Máximo Gómez, en el tramo comprendido entre la Mauricio Báez y La Paraguay, la acera ha sido convertida en estacionamiento de establecimientos comerciales y talleres de mecánica.
Pero el mal sigue y empeora en avenidas como la Nicolás de Ovando, donde hay tramos tomados totalmente, como la acera Sur, llegando a la Máximo Gómez, de Oeste a Este; pero lo mismo ocurre frente a la tienda Plaza Lama.
Más delante, esa vía está llena de puestos de venta de gomas para vehículos y talleres, por lo que los ciudadanos que deben caminar por la zona tienen que tirarse a la avenida con el peligro de ser atropellados por los vehículos.
También en la Pedro Livio Cedeño, en el ensanche Luperón, la vía ha sido tomada por dealer para la venta de vehículos usados, mientras en la avenida Padre Castellanos, han sido colocados puestos de todos tipos de mercancías, sin que nadie intervenga para impedirlo.
La propia avenida Duarte no se queda atrás: la venta de colchones, muebles, estufas, neveras, camas y todo cuanto se puede vender se exhibe en las aceras y parte de la vía destinada para los vehículos.
Esta situación se aprecia con mayor intensidad en el tramo comprendido entre la Eusebio Manzueta y la avenida V Centenario, próximo al liceo Juan Pablo Duarte. En el interior del barrio Villa Consuelo, la situación rebosa la copa y en las calles como la Hermanos Pinzón, Baltasar de Los Reyes, Baltasar Alvarez y otras, caminar o transitar es un infierno, pues todo ha sido ocupado con mercancías que van desde madera, inodoros, estufas y anafes hasta todo tipo de artículos para el hogar.
El fenómeno crece no solamente en la Duarte con París, José Martí y áreas vecinas, sino que se extiende y hoy en barrios como Villa Consuelo, calles del sector Don Bosco, Leopoldo Navarro, Pedro Livio Cedeño y otras vías, el peatón cuenta con muy poco espacio para caminar.
En Villa Consuelo, los espacios públicos no alcanzan para instalar negocios de todo tipo.
En la propia avenida Máximo Gómez, en el tramo comprendido entre la Mauricio Báez y La Paraguay, la acera ha sido convertida en estacionamiento de establecimientos comerciales y talleres de mecánica.
Pero el mal sigue y empeora en avenidas como la Nicolás de Ovando, donde hay tramos tomados totalmente, como la acera Sur, llegando a la Máximo Gómez, de Oeste a Este; pero lo mismo ocurre frente a la tienda Plaza Lama.
Más delante, esa vía está llena de puestos de venta de gomas para vehículos y talleres, por lo que los ciudadanos que deben caminar por la zona tienen que tirarse a la avenida con el peligro de ser atropellados por los vehículos.
También en la Pedro Livio Cedeño, en el ensanche Luperón, la vía ha sido tomada por dealer para la venta de vehículos usados, mientras en la avenida Padre Castellanos, han sido colocados puestos de todos tipos de mercancías, sin que nadie intervenga para impedirlo.
La propia avenida Duarte no se queda atrás: la venta de colchones, muebles, estufas, neveras, camas y todo cuanto se puede vender se exhibe en las aceras y parte de la vía destinada para los vehículos.
Esta situación se aprecia con mayor intensidad en el tramo comprendido entre la Eusebio Manzueta y la avenida V Centenario, próximo al liceo Juan Pablo Duarte. En el interior del barrio Villa Consuelo, la situación rebosa la copa y en las calles como la Hermanos Pinzón, Baltasar de Los Reyes, Baltasar Alvarez y otras, caminar o transitar es un infierno, pues todo ha sido ocupado con mercancías que van desde madera, inodoros, estufas y anafes hasta todo tipo de artículos para el hogar.
Fuente: Hoy Digital
Escrito por: JUAN M. RAMIREZ (j.ramirez@hoy.com.do)